¿Qué pasa? Sí, ¿por? ¿problema? Es que esto es mío y si quiero le guindo hasta ropa mojá. Pero es que yo estaba tranquilo y me dio un simposio, no, mentira, un soponsio, y por eso tomé sopa y que Papa Dios me perdone. La cosa es que si La botella es bonita si me duele el codo, quiere decir que no todo está perdido y que, aún en el peor de los casos, puedo seguir usando mi casco en mi casa, así que ya se entiende más la cosa, ¿no? En consecuencia, esta taza de té frío que se mete pa dentro de mi boca y me hace hacer glugluglú. Entonces creo que ya se puede ir viendo que no importa si la liebre es amarilla o rosada, lo que importa es que de este lado podamos seguir agarrándonos las manos como en la canción. Ese es el secreto de todo, hasta de la comida bien sazonada, ¿sabías? Bueno, ahí ta, pues... Y mejor me callo porque después me descubren el secreto.
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