jueves, 30 de julio de 2009

TALLERES S.O.S. (PRIMER «ROUND»)




Del 10 al 14 de agosto estaré realizando el taller Los Fanzinerosos como parte del programa de talleres vacacionales que ofrece Servicios Culturales S.O.S. Además de este, habrá uno sobre la fabricación de cámaras estenopeicas y otro sobre autorretrato y diseño de modas.

¿Más información? Clic en la primera imagen.

domingo, 19 de julio de 2009

NOTAS DE UNA POÉTICA (III)


La poesía suena
Juan Antonio Calzadilla Arreaza


«El efecto poético, la poesía de una frase, surge de un uso inusual del lenguaje. La poesía hace sonar el lenguaje como no suena en nuestro uso corriente. Según el modelo de la comunicación, el lenguaje es utilizado como instrumento o medio de un mensaje, y desaparece con la transmisión de emisor a receptor. Nadie se detiene ante las palabras que emitimos todos los días. La poesía, en cambio, hace sonar el lenguaje de otra manera, hace que nos detengamos anta la palabra.

Boris Tomachevski, el formalista ruso, buscó explicar este efecto con el término 'desautomatización'. El lenguaje tiene la propiedad de desautomatizarse, es decir, puede romper con los mecanismos de la comunicación ordinaria en los que él es simple instrumento imperceptible. La desautomatización hace que percibamos el lenguaje y no sólo el mensaje. Estos efectos de alteración o desviación en el uso habitual de la lengua, actos de desautomatización verbal, constituyen en general la expresividad literaria.

La desautomatización poética no transmite un mensaje (modelo de la comunicación) sino que expresa un sentido (modelo de la expresión). La visibilidad de la palabra, su afirmación de ser, mediante su expresión, un ser en sí misma, no la aleja de la realidad del contenido que expresa. El mensaje de la comunicación no es más real que el sentido de la expresión. El sentido es lo que hace que las palabras signifiquen algo. El mensaje más bien presupone el sentido. Como acto que liga el contenido a la expresión, el sentido es la síntesis fundamental de la realidad y el lenguaje. Al hacernos detenernos ante la palabra, palabra sonora, palabra que es, la poesía revela el poder significativo, afirmador de sentidos, del lenguaje.

El genial poeta y crítico vanguardista norteamericano Ezra Pound consideraba que normalmente hablamos con un mínimo de sentido (meaning). La poesía tiene por función recargar de sentido las palabras, depurando y remozando el lenguaje de una sociedad. El vigor de la expresión poética depende de la cantidad o intensidad de sentido que pone en juego. El poeta contribuye así a que la sociedad emplee el lenguaje, y por ende el pensamiento, de manera más clara, exacta y eficaz, más cargada de sentido.»

FUENTE: CALZADILLA ARREAZA, Juan Antonio (2005). Módulo para talleres de expresividad literaria y poética. Ministerio de la Cultura. Consejo Nacional de la Cultura. Caracas, Venezuela. pp. 9-10.

lunes, 13 de julio de 2009

FELIZ CUMPLEAÑOS + NOTAS DE UNA POÉTICA (II)


A un día de haberse celebrado un aniversario más del nacimiento de Pablo Neruda, transcribo un fragmento del poema «El hombre invisible», perteneciente a sus Odas elementales.

Yo me río,
me sonrío
de los viejos poetas,
yo adoro toda
la poesía escrita,
todo el rocío,
luna, diamante, gota
de plata sumergida,
que fue mi antiguo hermano,
agregando a la rosa,
pero
me sonrío
siempre dicen «yo»,
a cada paso
les sucede algo,
es siempre «yo»,
por las calles
sólo ellos andan
o la dulce que aman,
nadie más,
no pasan pescadores,
ni libreros,
no pasan albañiles,
nadie se cae
de un andamio,
nadie sufre,
nadie ama,
sólo mi pobre hermano,
el poeta,
a él le pasan
todas las cosas
ya su dulce querida,
nadie vive
sino él solo,
nadie llora de hambre
o de ira,
nadie sufre en sus versos
porque no puede
pagar el alquiler,
a nadie en poesía
echan a la calle
con camas y con sillas
y en las fábricas
tampoco pasa nada,
no pasa nada,
se hacen paraguas, copas,
armas, locomotoras,
se extraen minerales
rascando el infierno,
hay huelga,
vienen soldados,
disparan,
disparan contra el pueblo,
es decir,
contra la poesía,
y mi hermano
el poeta
estaba enamorado,
o sufría
porque sus sentimiento
son marinos,
ama los puertos
remotos, por sus nombres,
y escribe sobre océanos
que no conoce,
junto a la vida, repleta
como el maíz de granos,
él pasa sin saber
desgranarla,
él sube y baja
sin tocar la tierra,
o a veces
se siente profundísimo
y tenebroso,
él es tan grande
que no cabe en sí mismo,
se enreda y desenreda,
se declara maldito,
lleva con gran dificultad la cruz
de las tinieblas,
piensa que es diferente
a todo el mundo,
todos los días come pan
pero no ha visto nunca
un panadero
ni ha entrado a un sindicato
de panificadores,
y así mi pobre hermano
se hace oscuro,
se tuerce y se retuerce
y se halla
interesante,
interesante,
ésta es la palabra...

«CADA VEZ MÁS CIEGO»

Va cada vez más ciego

olvidó cómo se conjuga el verbo caminar
(ca-mi-nar)

ahora
sólo usa andar-a-tientas

tropezar es su oficio

se va como apagando
allá, a lo lejos
la brujulita
que guardaban las velas.

sábado, 11 de julio de 2009

NOTAS DE UNA POÉTICA (I)

Osip Brik fotografiado por A. Rodchenko.

Lilya Brik (esposa de Osip) con diseño de Rodchenko.


Sobre el ritmo
Osip Brik


«Si una persona salta en un terreno pantanoso y deja sus huellas, aunque esa sucesión de huellas sea regular, no es un ritmo. De igual manera, el poema impreso en un libro no ofrece más que las huellas del movimiento. Sólo puede ser presentado como ritmo el discurso poético y no su resultdo gráfico.

[...]

Los especialistas del ritmo poético naufragaban en los versos, los dividían en sílabas, en medidas y trataban de encontrar las leyes del ritmo en este análisis. Existen de hecho todas esas medidas y sílabas, pero no por sí mismas sino como resultado de un cierto movimiento rítmico; ellas ofrecen sólo algunas indicaciones del movimiento rítmico del cual resultan.

[...]

Todo se deriva del ritmo del discurso poético; la distribución en líneas y sílabas es su consecuencia.
Los eruditos tratan de fijar la intensidad de cada sílaba y deben admitir que distintas pronunciaciones del verso llevan a resultados diferentes. Este permanente malentendido es producto de la confusión del impulso rítmico con el verso ya realizado. Si aceptamos la primacía del movimiento rítmico, el hecho de que se obtengan resultados diferentes en el curso de distintas lecturas, no tendrá nada de sorprendente; no nos admirará obtener, en diversas lecturas de un mismo poema, una alternancia distinta de las unidades rítmicas.»

FUENTE: VVAA (1971). Antología del formalismo ruso. Centro Editor de América Latina. Buenos Aires, Argentina. pp. 50-52.

miércoles, 8 de julio de 2009

A DIARIO. CLAVES PARA UNA LECTURA



a) autonomía.
(Del lat. autonomĭa, y este del gr. αὐτονομία).

1. f. Potestad que dentro de un Estado tienen municipios, provincias, regiones u otras entidades, para regirse mediante normas y órganos de gobierno propios.
2. f. Condición de quien, para ciertas cosas, no depende de nadie.
3. f. comunidad autónoma.
4. f. Máximo recorrido que puede efectuar un vehículo sin repostar.
5. f. Tiempo máximo que puede funcionar un aparato sin repostar.

b) independencia.

1. f. Cualidad o condición de independiente.
2. f. Libertad, especialmente la de un Estado que no es tributario ni depende de otro.
3. f. Entereza, firmeza de carácter.

(Ambas definiciones tomadas del DRAE.)

c) «...el lenguaje es la forma de nuestro pensamiento. Se trata [...] de que el lenguaje forma el proceso del pensamiento y, como resultado final, lo limita hasta cierto punto. [...] Pensamos en nuestro lenguaje; pensar no es más que hablar.»

SCHAFF, Adam (1967). Lenguaje y conocimiento. Editorial Grijalbo. México D.F., México. pp. 18-19.

d) Nombro, no descubro
Cuando salgo de casa llevo conmigo a las palabras.
Entonces comienzo a descubrir las cosas,
veo esto y aquello con asombro de neófito
en una ventana. O quizás no veo ni descubro
nada nuevo y asombroso sino que nombro y nombro.
Por eso fue bueno traer conmigo a las palabras,
fue útil tenerlas a mano, conmigo, en alguna parte
de mi mente para comprobar
que todo lo que descubro se reduce a ellas.

Juan Calzadilla

domingo, 5 de julio de 2009

ANÓNIMOS

- ¿Pero cuál es el problema de que me despeine y tenga sueño?
- Es que así, fijate, no puedo pronunciar algunas palabras.
- Será que escuchemos un disquito por ahí, a ver si mejoramos.

En el apartamento, además de escuchar como 5 (léase cinco) discos, planearon saltar sobre los muebles... y así fue. Pero se cayeron cansados y se vieron en la necesidad de rodar para ir de allá para acá.

- Vení, tocá con la nariz el piso, ¿verdad que es dulce? –le dijo ella.
- Sí, sí, ahora te quiero más.
- Entonces vamos a pararnos.

Y eso hicieron.

Ahora se querían más y se estaba haciendo de noche, algo así como las siete pe-eme. Cuando él se dio cuenta de que el narrador dijo (o escribió) eme, juntó los labios e hizo un sonido casi vacuno que al narrador no le gustó para nada. A lo mejor fue por eso que no les puso nombres a él ni a ella y que decidió dejar esto hasta aquí.

viernes, 3 de julio de 2009

ELIZABETH SCHÖN

Hoy, nada más que por ser hoy, transcribo dos poemas que me regaló Elizabeth Schön:

[I]
Yo diría que los niños necesitamos, como los barcos, de un muelle muy amplio y de unas aguas muy quietas y transparentes.

[II]
Arranco.
Salgo veloz
ni la iguana me alcanza.

SCHÖN, Elizabeth (1998). Antología poética. Monte Ávila Editores Latinoamericana. Caracas, Venezuela. pp. 51 y 96.